La tabla de contenidos
La tabla de contenidos: 6
La introducción: 5
La promoción: 4
Los microrrelatos: 3
Las canciones de la semana: 2
La despedida: 1
La introducción
Ey, hola.
Soy Miguel Escribano y estás leyendo Gritando al vacío, la newsletter que se escribe a contrareloj. Esto es lo normal en esta modesta publicación, pero ahora hay más relojes en la ecuación.
En los últimos días han aparecido varios temporizadores en mi vida, que marcan hitos importantes en mi futuro a corto, medio y largo plazo. Cosas que hacer o eventos que ocurrirán. Y son todos positivos, que conste, pero no dejan de ser disruptivos y una fuente de nerviosismo.
Esta newsletter no es un diario y prefiero que los temas personales los tratemos con una cerveza de por medio, estimado lector, de modo que no entraré en detalles. Pero puedo adelantarte que, si los acontecimientos discurren como debieran, te daré la turra con diversas movidas durante las próximas semanas y meses.
Sin embargo, por ahora, optaré por el erotismo del misterio y la intriga.
Pasa una buena semana.
La promoción
El sábado 22 a las 19:00 estaré con mis compas en El Refugio del Crápula haciendo nuestro show de improvisación Somardas TV.
Será un show especial por partida doble, ya que celebramos el tercer aniversario de Somarda’s Comedy y porque seguramente será la última vez que lo hagamos. Así que no te lo puedes perder.
Los microrrelatos
Para esta semana he rescatado una de las frases que se me quedó pendiente hace unos meses: Te puedes hacer de oro.
Recuerda que, si me mandas una frase de entre 5 y 8 palabras, la usaré para contruir futuros relatos.
Dinero fácil
“Te puedes hacer de oro” decía la sonriente actriz del anuncio.
Cada vez había más publicidad de las clínicas de extracción. Y estaban abriendo más por toda la ciudad. Bueno, en los barrios ricos, no, claro.
Ya podía vender médula cualquiera que necesitase dinero rápido, y esas cantidades te cambiaban la vida.
“Te pagamos un adelanto, y el resto cuando lleguen los análisis del laboratorio. Igual se demora porque están hasta arriba” decían siempre “¿Querrías hacer otra extracción entre medias?”
El adelanto no era gran cosa, así que aceptaban. Y otra. Y otra.
Una pena que los resultados siempre llegasen cuando ya era demasiado tarde.
Eternidad mecánica
Te puedes hacer de oro, de plata, o incluso de bronce, si vas mal de pasta. Hay gente que se pone todo tipo de pijadas en el robot, pero yo prefiero el estilo clásico de acero inoxidable sin adornos, como en las pelis.
Entonces, cuando te sientas preparado, te enchufan, transfieren tu conciencia y ¡bam! Eres inmortal. Y ya, pues a vivir como androide.
A ver, barato no es, pero tienes siglos para ir pagando la deuda a tu ritmo. Y además no te cansas al trabajar, así que puedes echar un par de décadas intensivas en una mina en Marte.
Apúntate. Es un chollo.
El último trabajo
Te puedes hacer de oro o morir en el intento. En este tipo de trabajos no hay punto medio. Si te pillan, no hay juicio ni derechos. Bueno, el de permanecer en silencio sí que te lo aplican, eso seguro.
Pero, si sale bien, te retiras. Puedes comprarte un pasaporte y ser un niño de papá cualquiera en Cancún el resto de tu vida. Se acabaron los robos de poca monta y trapichear con mierda.
No soy idiota, sé que es probable que acabemos en un hoyo, sin caipiriña ni chicas guapas. Pero, si no lo logramos, quiero que sepan que al menos lo intentamos.
Las canciones de la semana
Esta semana te traigo pura violencia emocional de la mano de un monográfico de The Narcissist Cookbook. ¿Por qué? Porque puedo. Fight me.
Las letras de algunas de estas canciones pegan como un martillo, y a mí personalmente me agrietaron en un momento complicado, así que procede con precaución.
La lista de reproducción completa está aquí.
La despedida
Chao. Hasta luego. Adiós.
Un beso.